Soledad
Veo tus ojos
chorreando esa luz infinita
y es en ese momento cuando necesito
un perro, un bastón, una mano, una fé.
Y tú, pasas tocando el frío con suave silencio.
Luego yo te sentencio…
a que nombres todo lo que ahora no sé.
Veo tus ojos
chorreando esa luz infinita
y es en ese momento cuando necesito
un perro, un bastón, una mano, una fé.
Y tú, pasas tocando el frío con suave silencio.
Luego yo te sentencio…
a que nombres todo lo que ahora no sé.